Clase 37
En el Nombre de Dios, el Compasivo, el
Misericordiosísimo
ALGUNAS COSTUMBRES DE LA SHΑAH
Introducción
Como sabemos, las
costumbres y tradiciones de cada sociedad son un conjunto de conductas sociales
cuya realización se ha vuelto habitual para los miembros de esa sociedad,
quienes consideran que su conveniencia y bienestar se logra observándolas y
poniéndolas en práctica.
Las costumbres y tradiciones de cada sociedad son un
reflejo de los valores de esa sociedad y por supuesto, la fuente de la cual se
originan las tradiciones, costumbres y pautas de conducta son diferentes en
cada sociedad, comunidad, o escuela de pensamiento. Las costumbres y
tradiciones de los shias están repletas de significado, conceptos elevados y
valores. Muchas de las costumbres y tradiciones de los shias son símbolos
específicos de los valores y creencias doctrinales, entre los que se puede
señalar las ceremonias de duelo por el Imam Al-Husein, el Señor de los
Mártires (a.s.), la celebración de las festividades religiosas y fortalecer las
relaciones con los parientes en las mismas, la visita a los sepulcros, etc.
Las ceremonias de duelo
El amor y lealtad que se
profesa al Noble Profeta (s.a.w.) y a Ahl-ul Bait (a.s.) se consideran
la base del Shiísmo. El amor de una persona hace que ésta se asimile al amado.
Finalmente, de tal amor resulta aquello que el Imam ‘Alî (a.s.) manifestó de la
siguiente manera:
« إِنَّ اللَّهَ تَبَارَكَ وَ تَعَالَى اطَّلَعَ إِلَى الْأَرْضِ
فَاخْتَارَنَا وَ اخْتَارَ لَنَا شِيعَةً يَنْصُرُونَنَا وَ يَفْرَحُونَ
بِفَرَحِنَا وَ يَحْزَنُونَ لِحُزْنِنَا »
“Por cierto que Dios, Enaltecido y Glorificado Sea, miró hacia la Tierra y nos eligió; y asimismo eligió para nosotros seguidores (shias) que nos auxilian, se alegran por nuestras alegrías y se entristecen por nuestras tristezas”.[1]
Las manifestaciones de
duelo en los días de conmemoración del martirio de Ahl-ul Bait (a.s.) ya
eran costumbre en la época de los Imames Inmaculados (a.s.), si bien llevó
muchos años el hecho de que se convirtieran en una ceremonia de carácter
social.
Desde que el Imam Al-Husein
(a.s.) y sus fieles compañeros fueron martirizados el día 10 del mes de Muharram
(‘Ashûrâ’) del año 61 de la hégira de una manera tan nefasta, para expresar su
tristeza por tal trágico suceso, los shias realizan ceremonias de duelo a
partir del día 1º del mes de Muharram por espacio de diez días
(‘Ashûrâ’); y por el fallecimiento del Noble Profeta del Islam (s.a.w.) o el
martirio del resto de los Inmaculados de Ahl-ul Bait (a.s.) realizan
reuniones de duelo sólo el día de la conmemoración de sus fallecimientos.
Algunos grupos de nuestros hermanos sunnis también conmemoran y realizan reuniones
de duelo durante los días de ‘Ashûrâ’.
La primera manifestación
de luto colectivo registrada fue la realizada por los Tawuâbîn (los
arrepentidos) -que se refiere a aquellos que tras el suceso de Karbalâ’ se
arrepintieron de no haber auxiliado al Imam Al-Husein (a.s.)- frente al
sepulcro del Imam Al-Husein (a.s.). Cuando en el año 65 H.L. se dirigían
a luchar contra el ejército de los Omeyas, primero llegaron a Karbalâ’ y
lloraron sobre la tumba de Al-Husein (a.s.) y le dirigieron letanías.
Posteriormente se
extendieron las ceremonias de duelo, las que tenían lugar mediante la lectura
de elegías, poesías y cánticos de lamento, y que eran organizadas por los
mismos Imames (a.s.).
Gradualmente, y
paralelamente a la conformación de esas ceremonias como una costumbre y
tradición, los shias declararon el día de ‘Ashûrâ’ como un día de duelo. La
importancia de ese día para los shias llevó a que estas ceremonias poco a poco
se extendieran y con el paso del tiempo se introdujeron en estas ceremonias
diferentes costumbres de duelos locales, algunas, por supuesto, no son
aprobadas en absoluto por los sabios shias.
Según lo registrado sobre
este tipo de ceremonias en los libros sobre historia de la ciudad de Bagdad,
las mismas fueron celebradas por primera vez en el año 352 H.L.
en esa ciudad. En ese tiempo gobernaba Irak la dinastía de Âl-e Bûieh.
En el día de ‘Ashurâ’,
hombres y mujeres se reúnen en las huseinías o centros religiosos y en
las mezquitas, y mientras escuchan discursos de tenor religioso y tristes poesías,
lloran y se lamentan. En los países árabes también tienen lugar ceremonias de
recitación de los sucesos de la tragedia de Karbalâ’. Los shabîh jonî o
representaciones teatrales de los sucesos de ‘Ashûrâ’ es otra de las costumbres
de esos días. Es una especie de teatro callejero donde los dolientes
representaban los papeles de las personalidades del suceso de Karbalâ’,
recreando la tragedia para los presentes. A veces también estas ceremonias de
duelo se celebran en forma de grupos que se golpean los pechos con ciertas
costumbres particulares. También en estos días los shias suelen repartir
comidas entre los musulmanes.
¿Cuál es el objetivo de los shias al
celebrar estas reuniones?
1. Fortalecer el vínculo de afecto entre la gente y Ahl-ul
Bait (a.s.); un afecto que les lleva a la realización de buenas obras.
2. Motivar un espíritu de unión y solidaridad entre
la gente.
3. Mantener vivo el espíritu de lucha y de
sacrificio contra la opresión y la tiranía.
4. Familiarizarse con los fundamentos islámicos y
las enseñanzas del Corán y el Profeta (s.a.w.). Al participar en estas
reuniones de conocimiento y amonestación, los exhortadores religiosos
familiarizan más a las personas con el Sagrado Corán, el Profeta (s.a.w.) y Ahl-ul
Bait (a.s.).
Las ceremonias de júbilo y alegría en conmemoración de los nacimientos de Ahl-ul Bait (a.s.) y las festividades
Los shias realizan
ceremonias para expresar su júbilo y alegría los días de los nacimientos de Ahl-ul
Bait (a.s.). En esas ceremonias que se celebran en un marco de total
religiosidad, los exhortadores religiosos familiarizan a las personas con los
conceptos del Sagrado Corán, del Profeta y de Ahl-ul Bait (a.s.).
Entre los shias las
ceremonias del día 15 del mes de Sha‘bân, en que se conmemora el nacimiento del
Imam Al-Mahdî (a.ÿ.), tienen una importancia especial. En ciudades religiosas
como Nayaf, Karbalâ’, Mash·had y Qom, estas ceremonias se realizan con gran
esplendor. La sagrada Mezquita de Ÿamkarân, que se encuentra en la ciudad de
Qom, se cuenta entre los principales centros donde se realiza esa celebración
con gran esplendor.
La celebración del Día de Gadîr
Otra de las celebraciones
shias es aquella en la que se conmemora el día de la festividad de Gadîr. El
día 18 del mes de Dhul Hiÿÿah es el día en el cual el Gran Profeta del
Islam (s.a.w.) designó al Imam ‘Alî (a.s.) como su califa y sucesor después de
él. Como dije en otras oportunidades, esto ocurrió en la región de Gadîr Jumm.
El primer reporte acerca de la celebración de ese día como una ceremonia oficial
fue realizado por Ibn Al-Azîr -sabio sunni- al mencionar los sucesos del año
357 H.L. en su libro de historia Al-Kâmil, donde dice respecto a los
shias de Bagdad que:
“Es habitual para ellos manifestar tristeza en el día de ‘Ashûrâ’ y alegría en el día de Gadîr”.[2]
Asimismo, otro sabio sunni, Ibn Al-Ÿauzî,
al mencionar los sucesos del año 389 H.L., dice:
“Es habitual para los shias del sector del Karaj y del sector de Bâb at-Tâq (en Bagdad) celebrar el día de Gadîr erigiendo bóvedas con cúpula, vistiendo ropas nuevas y poniendo adornos”.[3]
La visita a los sepulcros del profeta (s.a.w.) Y de Ahl-ul Bait (a.s.)
Otra de las costumbres
arraigadas entre los shias es el hecho de visitar los sepulcros del Profeta del
Islam (s.a.w.), de los Imames Inmaculados (a.s.), y así también los de algunos
de sus puros descendientes y otras personalidades. Asimismo, construyen
santuarios en el lugar que se encuentran sus tumbas. En los textos de
narraciones de los shias, existen muchísimos hadices en los que se incentiva a
los shias a visitar esos nobles santuarios y explican las recompensas que
conlleva tal acción.
El apego de los shias por
esos santuarios llevó a que se fundaran importantes centros de la Shî‘ah
en esos lugares, tal como lo vemos en las ciudades de Nayaf, donde se encuentra
el puro sepulcro del Imam ‘Alî ibn Abî Tâlib (a.s.); en Karbalâ’, donde
se encuentra el sepulcro del Señor de los Mártires, el Imam Al-Husein
(a.s.); en Mash·had, donde se encuentra el santuario del Imam Ar-Ridâ
(a.s.); y en Qom, donde se encuentra el puro sepulcro de Fátima Al-Ma‘sûmah
(a.s.), la hermana del Imam Ar-Ridâ (a.s.).
Al congregarse en estos
santuarios los shias logran algunos beneficios como:
- Fortalecen su vínculo con Ahl-ul Bait
(a.s.).
- Al leer la ziârah o salutaciones de visita, las cuales poseen un profundo contenido que pone énfasis en el Tauhîd o Monoteísmo y otros conceptos islámicos, acrecientan su fe en Dios.
[1] Bihâr
al-Anwâr, t. 65, p. 18.
[2] Al-Kâmil fî at-Ta’rîj, t.8, p.589.
[3]
Al-Muntadzam, t.7, p.206.
No hay comentarios:
Publicar un comentario